Un constante billete de ida y vuelta

Mi vida la paso entre dos puntos y a veces al despertar no sé muy bien donde me encuentro, si en mi añorada localidad natal o en la queridísima ciudad de adopción

...y no me parece mal. No me da miedo. Nunca he tenido miedo y menos a lo que estamos hablando".

Me quedé helado y me sobrecogió el alma al oír estas palabras de Antonio Gala en la radio un día de esta semana mientras desayunaba (creo que era jueves), sentí una enorme tristeza y casi acepte cortésmente su despedida. Nunca he leído nada de él y casi desconozco su obra, e incluso cuando era un crío o adolescente no podía soportar sus entrevistas, pues su voz y su postura ante el periodista me resultaba algo prepotente y altivo, pero con al paso del tiempo y alguna dosis de madurez comprendes que esa postura es la de una persona que se reconoce así mismo y es capaz de reírse de sus complejos; y para ello debe ser uno muy inteligente, y aún más; hacerlo de la forma que lo hace él; y por supuesto ahora hacerme reir.

Palabras de Antonio Gala al recoger el premio Quijote de Honor 2011: "Hay que hacer reír y saber reírse; hay que hacer llorar y saber llorar y hay que saber decir adiós. Quizá es una oportunidad de decirlo con premio", 

Antonio Gala


Por mi parte estoy, en un mar de dudas; algo que no extraña cada vez que se afronta un reto y debes planificarlo; surgen las dudas, se produce un caos de números, datos y previsiones en mi cabeza, al modo del hombre del tiempo en el telediario, y mientras compruebas la planificación surgen el recuerdo de la palabras de Antonio Gala "Presiento lo que va a venir..." pero esta vez, yo si tengo miedo. Ésta semana comienzo el plan, aunque lo modificaré a mi antojo y siendo sincero conmigo mismo según vea la evolución de los entrenos. Además tampoco estoy muy seguro de tener las fuerzas, las ganas y el tesón del año pasado; y en el horizonte tenemos una fecha muy importante que quizá trastoque mis planes y eviten que corra al final el maratón; pero en la vida hay cosas más importantes.
La semana ha sido dura, además de las clases de Tao Yin, el Gym, los entrenos, etc.. he vuelto a recuperar la bici, lo cual repercute en la carga de actividad de la semana, por lo que el cansancio ha aparecido dejando secuelas, durante la semana y culminando en el viernes, día que fui incapaz de levantarme para correr. He vuelto a recupera parte del circuito de cuestas que tanto me gusta y las series de fartlek se han ampliado convirtiéndose en un entreno progresivo del jueves que me dejo contento al igual que cansado, empezando en 5:38 y terminando con unos 4:54. El sábado me salté mi entreno de bici, sustituyéndolo por un circuito de tiendas, acompañando a la familia que nos ha visitado este finde. Pero lo mejor llego el domingo cuando volvimos a salir Fernando y yo para entrenar por la CdC, disfrutar de la casi... primera helada del año, y repito lo de disfrutar, porque charlando y riendo las cosas se llevan mejor, escogiendo un circuito algo rompe piernas y donde quedo claro quien se encuentra mejor a estas alturas; una pista, no soy yo.

18/12/11 (run): 13,2 km en 1:13:06 (1º km en 5:52) 2ºC / Triumph 7
15/12/11 (run): 9,3 km en 0:56:18 (1º km en 10:48) 2ºC / Triumph 7
13/12/11 (run): 5,9 km en 0:39:30 (1º km en 11:33) 4ºC / Triumph 7

A veces por ser un animal de rutinas; origina no saber administrar ese tiempo de más que se tiene de lo habitual, ello trastoca mis hábitos y mis espacios.

Como de costumbre, al visitar al pueblo, toca compartir tiempo con la familia, amigos y encontrar tiempo para tus aficiones, intentando desconectar y aprovechar el tiempo que no tienes a diario, aunque esta vez me olvide de mi hermana y la familia.
Con un clima que anticipa a el invierno solo apetece sentarte junto a la mesa del comedor y calentarte con el brasero sintiendo cierto calor familiar, mientras que hablas con los padres y ves caer la tarde por la ventana. Y eso he pensado en cada uno de los entrenos de esta pasada semana. También es cierto que es peor pensarlo que realizarlo, pues una vez puestos en marcha, el cuerpo creo que asume que no hay vuelta atrás y se deja llevar, por eso, creo que en esos momentos previos a salir a la calle, calzarte las zapas o vestirse, son definitivos para echar al traste cualquier planificación. Y eso me ha pasada esta semana pasada, es cierto que cuando uno tiene compañía, el frío no es hiela tanto, la lluvia no empapa tanto y la niebla deja ver más de lo que intuimos, pero también es cierto que cuando uno se acostumbra a correr solo cuando comparte entrenos, cuando vuelve a la rutina uno es algo más apático y causa desgana; lo que se convierte en unas de las razones por las que hasta el sábado, la pierna parecía que dolía más de lo que realmente molestaba, que cuando el sol estaba de fuera yo viese chuzos de punta, y que cuando sonaba el despertador yo pensaba que era un sueño y realmente no tenía que levantarme.

Por todo ello después de entrenar días alternos y combinando a los compañeros de fatigas; un día con Pepe y Gonzalo; y el otro con JCarlos e Ismael, el jueves cuando sonó el despertador e intentar levantarme una simple molestia me hizo volver acostarme y pensar que me dolía muchísimo y lo mejor sería descansar que para algo era fiesta; y esto es una muestra de lo que paso el viernes cuando tocaba Gym y después de llegar a casa y llegar la hora de cambiarme me basto un simple ¡¡¡ahhh, que cansado estoy!!! para dejarme caer en el sillón y pesar que si eso, yo, ya.....
Sin embargo el sábado, doble sesión. Me levanté y fui al "poli" para realizar los deberes pendientes y el cambio es abismal, pasas en cuestión de 12 horas, de compartir cargas con el campeón mundial de porteros de disco a saludar al campeón local de levantamiento +65 años, para después liberar al cuerpo de la pesadez y aburrimiento con una sesión suave de una hoilla por la CdC, intentando evitar la lluvia de la tarde, a la cual culpé por no poder quedar con Fernando, por el miedo a que el día siguiente el día amaneciese sucio y eso propiciase dejarle tirado. Por ello me arrepentí un montón cuando el domingo pospuse por la dichosa pereza el entreno del domingo a "salgo mejor a partir de las 12..., quizá mejor por la tarde y termino de ver el cross..., son las 17h y estoy muy bien aquí tumbado... Hasta que pasadas las 6:30, salté del sillón y me fui a correr intentando llegar a los 12 km. Al terminar, cuando volvía a casa me encontré con Fernando, estuvimos hablando un rato, fijando entrenos, fechas y ante todo poniéndonos al día. Estoy deseando que llegue el domingo.


11/12/11 (Run): 11,36 km en 1:04:34 (1º km en 9:55) 8ºC / Triumph 7
10/12/11(Bike): 22,75 km en 1:03:21
06/12/11 (Run): 13,97 km en 1:20:13 (1º km en 6:09) Triumph 7
04/12/11 (Run): 12 km en 1:06:07 (1º km en 5:59) Triumph 7


Miguel Endara, paciencia, paciencia, paciencia...



He cambiado de marca.

El término Tao Yin significa Camino Interior o Camino de la Energía. Está constituido por un conjunto de ejercicios físicos medico-preventivos basados en las enseñanzas filosóficas taoístas, que estimulan el organismo con el objetivo de mantener el cuerpo en buena salud y ser la base de cualquier práctica taoísta, como el Chi-kung y el Tai Chi.
El Tao Yin es el ejercicio más antiguo de la Medicina Tradicional China. El paso previo a la práctica de Chi Kung y Tai Chi. Antiguamente se practicaba bajo prescripción facultativa ya que prevenía y curaba enfermedades agudas y crónicas. Reestablece la estructura mecánica del cuerpo porque trabaja con la musculatura interna, los tendones y meridianos. Son ejercicios sencillísimos que enseñan a dirigir la energía a cualquier zona afectada, física, mental o emocionalmente. El objetivo esencial de Tao Yin es crear equilibrio combinando fuerza, flexibilidad y energía interna. Hemos constatado con la práctica, que los ejercicios del Tao Yin puede aportar mejoras determinantes en la salud de los practicantes, incluso en alumnos con muchas patologías, nos lleva por el camino de la recuperación de nuestro propio ritmo. Con la aplicación del “trabajo Yin” introducimos suavidad y firmeza, relajación y fuerza, elasticidad y garbo a la dinámica corporal. El aprender a moverse respetando la respiración, cadencia de inspiración y exhalación, unidos a una justa fuerza en tendones y músculos, permite devolver al cuerpo un estado completo de armonía. Esto es muy relevante en nuestra salud. La enfermedad suele aparecer a consecuencia de una perdida de equilibrio a nivel físico, químico o emocional. El recuperar capacidad de adaptación al organismo es un paso fundamental en la conquista de la salud.  Una clase de Tao Yin nos permite habitar nuestro cuerpo, darle un contenido saludable. De esta manera estimularemos la secreción de endorfinas, con lo que las sensaciones pasaran a ser positivas, y nuestro estado de ánimo mejorará automáticamente.

Tras saltar las alarmas en la revisión anual de septiembre de mi patología respiratoria, decidi buscar alguna actividad que me hiciese serenar, relajarme y aprender a controlar la respiración. Lo importante era evitar subir la dosis de inhalador y ante todo llegar a recurrir a los corticoides, por ello busqué algo que me ayudase a educar mi aparto respiratorio, y para buscar existe "San Google", y después de pinchar aquí y allí, en unas de las páginas encontré el Tao Yin, una disciplina desconocida para mí, pero que supone un pilar para el más conocido Tai Chi. Por ello, me busqué una compañera de actividad y este martes Luisa y yo asistimos a nuestra segunda clase de Tao Yin.
Con la poquita práctica (sólo dos horas), puedo ir sacando alguna conclusión; la primera de ellas, es que estoy contentísimo de los pequeños resultados obtenidos, es increíble la sensación y serenidad con la que sales de la clase, las tensiones se han omitido y uno llega a sentirse más liviano, recuperando cierta flexibilidad que los músculos habían olvidado. Pero ante todo es poder dedicar una hora a escuchar a tu cuerpo y sentirlo, algo que olvidamos hacer con el frenesí diario. Y todo ello sin hablar de los beneficios respiratorios, los cuales compruebo que me llevarán más tiempo del imaginado, pues después de todo supone educar al cuerpo a respirar y si algo soy; es un poco cabezón.

Por lo demás, sigo con mi fase de "reseteo", aumentando kilómetros semanales, sumando más tiempo total, y haciendo alguna sesión de fartlek y ha estas alturas del año; capas. Capas de ropa para evitar el frío; porque en las últimas cinco salidas no he pasado de los 4 grados de temperatura y me está costando habituarme a estas temperaturas, teniendo que sacar del armario las mallas largas y la segunda capa de invierno.
Y para combatir el frío una buena onza (o más) de chocolate todas las noches. La recompensa del día.


Otra manera de conquistar mi camino interior.

29/11/11
Run: 7,8 km en 0:50:43 (1º km en 11:41) 1ºC / Triumph 7
30/11/11
Run: 4,85 km en 0:30:15 (1º km en 8:30) 1ºC / Triumph 7



Como he disfrutado con el vídeo.

Es curioso como un pequeño despiste te trastoca y te hace ir a remolque y con la lengua fuera durante toda la semana.
Como sigue siendo habitual el martes con casi media hora de adelanto en una de mis constantes volteretas en la cama, me desperté e instintivamente miré el despertador para ver cuanto tiempo quedaba para que sonara el despertador, ¡Todavía puedo seguir durmiendo un ratillo!; pero para cuando quise volver a abrir los ojos era demasiado tarde, después de comprobar que olvidé activar la alarma. Por lo que el entreno del martes lo perdí, aunque con la intención de recuperarlo el jueves saltándome el día de descanso algo que el sentido común unos días después me hizo replantearme y asumir que entreno perdido es igual a descanso merecido.
Semanilla de acumulación, con entrenos de carga, con sesión de pesas y tirada larga buscando terreno blando y añadiendo cuestas, y para soltar piernas una sesión de saturday's bike.
Una semana como otra cualquiera sino fuese porque he incorporado una novedad, una sesión semanal de una disciplina taonista, de la cual hablaré en unos días, pues necesito más tiempo para asimilar, conocer y poder hablar de ello.

23/11/11
Run: 6,02 km en 0:45:12 (1º km en 14:17) 12ºC / Triumph 7
25/11/11
Run: 6,97 km en 0:45:03 (1º km en 9:02) 3ºC / Triumph 7
26/11/11
Bike: 30,72 km en 1:32:21
27/11/11
Run: 12,11 km en 1:10:29 (1º km en 6:35) 2ºC / Triumph 7

Buscando una de las canciones que consiguieron motivarme el sábado en una de las subidas he descubierto a Kelsey Snowdon ¡Para gusto, colores!



Kelsey Snowdon

El fin de semana se ha adelantado esta vez –refiriéndome al apartado de entrenos, se entiende–.

Durante la semana seguí con el plan diseñado por mi, basado y proyectado con un corta-pega de aquí, otra parte de allí, etc., y con la suposición de que empiezo a conocerme (a estas alturas de mi vida!!).
Por ello el viernes me levanté con las pocas ganas habituales pero con la sensación de que las piernas comienzan a asimilar la carga de estos días iniciales, la intención era llegar a los cuarenta minutillos marcados como límite en entrenos entre semana e intentar un ritmo cómodo que me facilitara en entreno de fuerza de por la tarde. Pero con tranquilidad se lo tomó mi compañero de entrenos (el garmín), el cual tardó casi un cuarto de hora en marcarme el primer kilómetro de la mañana. Además sorprendentemente esta mañana no hacía casi nada de frio y me ha tocado sudar como un pollo, para realizar al final 5,54 km en 0:41:31 (1º km en 14:33) 12ºC / Triumph 7.

Por la tarde me he acercado al gym, para confesarle a la monitora el motivo del porqué quería pasar alguna tarde a la semana entre ésas cuatro paredes, rodeado de músculo, de sudor y de miradas desafiantes; mientras le relataba, ella me miraba con compasión como intentándome decir "¿pero que necesidad tienes?", después me ha dado un circuito básico de aparatos, acompañado de algunos consejos en su realización; los cuales e intentando saltármelos lo menos posible. Esta fase del entreno es la que menos me gusta, aunque aporte muchísimos beneficios, y la explicación es sencilla me encuentro desubicado entre esas paredes, y sólo disfruto de la última fase, después de los aparatos y terminas con la fase de cardío corriendo en la cinta.

El triumvirato !!!


Sábado por la tarde, casi recién llegado al pueblo, toca comida rápida e intentando no abusar, pues había quedado a las cuatro con JCarlos e Ismael para ir a entrenar al monte, así matábamos dos pájaros de un tiro, evitábamos las posibles lluvias previstas para el domingo y aprovechábamos la hora de la siesta para trotar e interferir lo menos posibles en labores familiares. Llegada al monte, y sin perder tiempo comenzamos a correr, tal eran las prisas que el garmín no lo había encendido y ya estábamos dando las primeras zancadas. El ritmo suave pero no muy continuo según el tema de conversación el ritmo variaba, y aunque intentaba hacer de paquete evitando así que el ritmo fuese demasiado alegre, pues me sentía pesado por el estomago, con la sensación de no haber realizado la digestión, pasada la primera media hora noto las primeras malas sensaciones, las piernas las noto bien y la sesión de pesas del viernes no pasa factura, sin embargo haber comido con ansiedad y algo tarde me hace parar con 8,6 km en 0:53:49 (1º km en 9:29) ? / Triumph 7, les digo a mis compañeros que sigan que al volver seguimos juntos, mientras espero y tomo algo de aire, compruebo que el aire me deja frío y para evitar un costipado comienzo a trotar pero observo que voy a ser incapaz de seguir el ritmo de ellos y para no estropearles el entreno decido volver al coche trotando lo más suave posible para evitar el enfriamiento, adelantándome éstos al final del entreno (segundo sector: 3,1 km en 0:20:45 (6:42)). Entreno agradable en buena compañía que inyecta motivación para el resto de la semana.

Día precioso de lluvia desde la ventana.


La semana va de consultas, consultas profesionales.


La cita del martes la tenía pendiente desde el pasado mes de marzo mientras preparaba el maratón, con la acumulación de kilómetros, los pies sufrieron infinidad de ampollas y las consecuentes uñas negras, etc., pero como no hay quien me toque los pies, o mejor dicho no dejo que me los toquen, para evitar el baile compulsivo y las consecuentes muecas sugestionadas por el roce, decidí hacerme autosuficiente; gracias en parte, a la experiencia conseguida con el camino de Santiago y lo aprendido observando a Luisa. Pero esta vez me he tenido que rendir y acudir al podólogo, pues una de las uñas me daba problemas e incluso me producía cierto dolor y tengo que reconocer que la experiencia engancha, eso sí mordiéndome el labio para evitar gritar y soltar algún movimiento epiléptico de la pierna al sentir cierto cosquilleo.
Pasada la vergüenza del primer momento al ver los pies y de darle mil excusas de porqué no había ido antes, me sumergí en un profundo silencio solo roto por ciertos monosílabos con los que intentaba no perder la concentración en evitar dar algún grito de nerviosismo.
Por la mañana sesión de carrera para hacer 5,3 km en 0:40:18 (1º km en 12:49) 7ºC / Jazz 12.

Foto obtenida de http://www.traveliux.com/ver_galeria.php?x=36


Y hoy he vuelto a pasar por la consulta de alergología, y tengo que confesar que no con cierto temor y algo nervioso; preocupación que no se ha desvanecido durante este mes. Durante un rato me ha tocado esperar pues enfermería no había comenzado, y durante el tiempo de espera entre repetición de pruebas, he intentado relajarme oyendo música, pero sin embargo han sido unas niñas las que han conseguido tranquilizarme y dibujarme una mueca, escuchando como comentaban a su abuela y sus madres respectivas, la realización de la espectrometía "¡a mí me cuesta mucho subir el pájaro!", le comentaba una a la otra, mientras que las madres le intentan dar todo tipo de mimos y atenciones, para que noten que ellas les acompañan; al salir la enfermera y llamar a Marga, la niña con el pelo rubio rizado, ha dado un salto nervioso y con un andar muy resuelto se ha dirigido velozmente a la silla adelantando entre las piernas a la enfermera; la pequeña tenía prisa se había perdido la excursión del cole y quería volver pronto a casa. 
Y observando este tipo de escena, es inevitable que recuerde a mis padres acompañándome de niño a nuestras visitas a Ciudad Real; visitas largas, aburridas y llenas de incertidumbres, donde recuerdo a mi padre sentado, callado y con un gesto nervioso aun lado mío y mi madre angustiada por mi sufrimiento al otro. Aún creo que ambos sufren cuando me oyen decir que voy a preparar el maratón o correr tal carrera y recuerdan mis ataques de asma.
Antes de ir a la Fundación esta mañana tocaba sesión suave para acostumbrar al cuerpo a 4 sesiones semanales de entreno: 3,5 km en 0:30:05 (1º km en 14:18) 5ºC / Jazz 12.

Fundación Jiménez Díaz.

El sábado descansé, decidí no poner el despertador, y mientras desayunaba, cambié de planes y volví a tomar la bici como compañera de jornada. Debido a que salí tarde e intentando no cargar demasiado al cuerpo, me lo tomé con cierta tranquilidad e intentando pisar el asfalto lo menos posible, pues el terreno estaba algo blandito, lo que permitía jugar con los senderos y olvidarme de subidas u fuerza. Además disfruté viendo los colores otoñales de las hojas de los arboles y es que en estas fechas la CdC está muy bonita y como estas al caer tiñen los senderos de amarillos y ocres vivos.
En total: 32,62 km en 1:32:21 una media de 21,2 km/h

Que serenidad deja, observar y respirar profundamente.


La experiencia exótica del finde de semana fue probar por primera vez la comida japonesa, eso sí, como llevábamos tiempo deseando probarla y nos acompañaba un bilbaíno de pro, que no falte comida, nos decidimos por un menú degustación sin limite de número de platos, empezando con las ensaladas de algas, la tempura de verduras, los rollos, el sushi, los california, siguiendo con los tallarines, los arroces, los nakis, shumais... y no se que más, porque llegue a peder la cuenta de los platos que había probado y ante todo de sus nombres, y gracias a que no mezclé con salsa y pude distinguir si había probado una cosa u otra. Total que nos quedamos sólos en el restaurante intentando dejar lo menos posible de comida sobre la mesa y llevándonos los palillos a casa para practicar para la próxima vez. 

El cocinero es mejor que el fotógrafo.


El domingo amaneció con dudas (aunque la ingesta de hidratos de carbono anoche fue abundante), las piernas las notaba algo cansadas de esta semana y no me apetecía nada volver a salir a correr, por lo que busqué plan para pasar la mañana, sin embargo el cielo empezó a cambiar y volverse más oscuro por lo que observando la climatología, decidí seguir con mis hábitos, calzarme las zapas, ponerme el uniforme y salir a correr como casi todos los domingos; la pega, que el uniforme escogido la noche previa, era para horas más mañaneras, lo que a la larga no me vino mal, pues para evitar quedarme deshidratado, tuve la excusa perfecta para seguir mi plan "casero" de motivación, el cual consiste en bajar el ritmo durante semanas para volver a recuperar la tensión y la adrenalina (ya llegará el momento en el que el cuerpo pida una carrera para soltarla). Pero como la motivación es baja estuve en más de una ocasión de abandonar al observar que las nubes se alejaban y la idea de refrescarme se esfumaba; habrá que recurrir al "chino" de vuelta a casa para hidratarme.
Total running: 8,86 km en 1:00:15 (1º km en 14:21) +17ºC / Triumph 7
Sumando esta semana unos ridículos 21,2 km semanales, !!Para lo que hemos quedado!!!

Os dejo que tengo ejercicios pendientes !!!

Empecemos con un tutorial típico spanish !!!

Hoy once de noviembre de dos mil once, se especula con el número uno, el cual es sinónimo de buena fortuna para los numerólogos y sin embargo el mismo número es para los esotéricos señal de catástrofe, o quizá sea al revés.

Apocalipsis aparte, esta mañana ha sido el segundo día de mi fase de "reseteo" físico y mental, he madrugado con tiempo suficiente para no tener que hacer las cosas con prisa, y una vez vestido y preparado, he bajado a la calle sin el pulsómetro, sin mi toma de Ventolín®, sin gafas, sin lentillas y ante todo sin frío, aunque me haya quedado helado al ver la temperatura en la marquesina del autobús, la cual marcaba +14ºC, sólo he podido exclamar !! cáspita, pues quizá sea hoy el final!!!; al ver la alta temperatura en las fechas en las que estamos.
El domingo pasado en mi día de reflexión profunda tomé la decisión de volver a empezar, olvidarme de la intensidades, los ritmos, los entrenos de carga, etc. y volver a disfrutar de correr, y utilizar el footing como herramienta de descompresión, de este ritmo alocado y frenético del cual me contagio a diario. Por ello, he prestado atención a la zancada, a la postura, a la respiración, pensar en mis cosas y he intentado desconectar observando al cielo, y el juego que se traía éste con las nubes y la luna. 
De vuelta a casa he intentado repetir el mismo circuito que el pasado martes, pero al llegar al punto final he observado que el ritmo ha sido algo más rápido, y decido trotar hasta llegar a casa para completar los casi 2 minutos que me faltaban para completar el entreno, al llegar y para el crono observo con sorpresa que he recorrido la misma distancia, lo cual me da que pensar que puede ser una señal, ¿querrá decir que debo aprovechar el tiempo?, ¿que debo escapar de todo?, ¿que debo hacer cambios?, ¿que debo dejar de correr?, ¿que debo comprar lotería de la ONCE? –¡Eso, será eso!– exclamé durante me duchaba.
Mas tarde, cuando me dirigía al trabajo, al llegar a la esquina y ver al vendedor de la ONCE, he rebuscado entre los bolsillo según me acercaba a él, mientras le preguntaba !uno del once, once, once, por favor!, !A buenas horas, si están agotados desde hace días!!
!! Malditas señales !!! 

Hoy: 6,17 km en 0:40:12 (1º km en 8:28) 14ºC / Triumph 7

Comprobando un libro esta mañana, !no he podido resistir la tentación! 

Han pasado quince días desde la última vez que me calcé las zapas, y durante este período me he dedicado a comer con ansiedad, endulzar el final de la jornada con varias onzas de chocolate, salir un día con la bici y contemplar pasar el tiempo mirando una pantalla del ordenador con cara de abduccido. Y es que es ahora cuando el maratón está pasando factura, no hablo del aspecto físico, sino del psicológico, pues he perdido la ilusión de estos dos años, me cuesta entrenar y no hablemos de madrugar. Además me he visto sin pruebas a corto plazo que pongan un poco de aliciente; quedándome sin dorsal para el Duatlon de Valdemoro y descartando Aranjuez por tener que hacer dos viajes ante la imposibilidad de retirar el dorsal el mismo día de la prueba. Por ello el domingo estuve buscando y rebuscando una excusa para salir a correr con cierta regularidad, pero el cambio de organizador del Maratón de Madrid no me da buena espina, por lo que he decido salir a correr con regularidad y dejar pasar el tiempo y dentro de unos meses tomar una decisión, aunque si esta dependiese de mi estado físico en el entreno del pasado martes la respuesta sería NO.

Marte 8-11: 6,17 km en 0:40:07 (1º km en 6:54) 7ºC / 7 Thriumph



Fotos de archivo, pues ayer con el baño de multitud
 y entre risas no me acordé de hacer fotito.


Ayer decidí, decir sí a Julián, pues ya le había dado la negativa durante muchas veces; bueno eso y que hubo cambio de planes y salíamos con la bici por la CdC. Como era festivo en Madrid, Julián convocó "kedada" para pedalear un ratillo y charlar durante un buen rato, el punto de concentración fue Lago. Al llegar me encontré con Alberto el cual le costó reconocerme "Con estas pintas aún no nos conocíamos!!!", llegando los demás a continuación (excepto Ernesto que llevaba tiempo por allí pero al no conocerlo...) Julian, Eladio, Carlos y Rodrigo. Después de los saludos y presentación de rigor, comenzamos la jornada ciclista tomando el sector socuéllamino la voz cantante y dirigirnos al paseo de los Piñoneros hasta cruzar el puente e ir paralelo al río para volver por la zarzuela donde Alberto con su bici de paseo tomó la voz cantante (el tío se portó como un campeón), después volvimos a acceder por Cagigal a la Casa de Campo por el paseo del Rey (creo recordar que se llamaba así) y donde Carlos y yo no dejamos de ver y reconocer a corredores profesionales que entrenaban por la zona. Comenzamos a hacer parte de la Tapia hasta la subida del cerro de las covatillas, donde hubo parada para charlar un rato y hacer grupo y donde Julian aprovechó para sacar su inseparable primer almuerzo. Desde este punto nos dirigimos hacia la puerta de Somosuaguas, donde después de hacer una larga parada decidimos sudar un poquito para ganarnos las cervezas del post, eso sí, donde no podía faltar el bocadillo típico de Julián, el cual no paró, tanto de pedalear como de comer mientras subíamos. Buena mañana y muy buena compañía, lo cual es muy gratificante, cuando uno está en vacas flacas, con muchas dudas en la cabeza y con falta de motivación. 

Al final (Miércoles, 9-11): 33,58 km en 2:43:53 + cerveza y conversación en 0:48:55 (aproximadamente....)



Ayer no tuve prisa para levantarme, había que disfrutar del día festivo.
Con cierta tranquilidad preparé todo lo necesario, para mi salida con la bici, la cual me servirá como despedida; pues a partir de hoy sólo la utilizaré para salir los fin de semana, hasta la vuelta del buen tiempo. Cuando me disponía a salir han comenzado a caer una fina lluvia, mientras en la radio un comentarista daba una lista de deportistas fallecidos; entonces me he acordado de los vídeos que vi hace tiempo pero que tanto me emocionaron sobre el rescate de Iñaki Ochoa en "Informe Robison". Este recuerdo y esa emoción no he podido quitármela durante todo el día de la cabeza.




Creo que es espectacular, dedicarle un poco de tiempo en verlo, que lo merece.


Debido al descanso durante toda la semana anterior; sin practicar nada de ejercicio, las piernas las tenía muy frescas y con ganas de guerra, y aunque en un principio he intentado controlar la ansiedad, pasada la media hora me he rendido, dejándome llevar por las ganas.
Al final han salido 48,85 km en 2:09:28 (22,6 km/h), lo cual no está nada mal pues no he podido usar el plato grande en ninguna ocasión.




Se acabaron las vueltas veloces a casa, ahora comparto mi espacio vital con cualquiera en el metro, acompañado de sus olores, claro !!!.

Día 30 de octubre, último domingo de mes y por lo tanto. día que coincide con el cambio horario. Fecha que anuncia las vísperas de las fiestas de los Santos en nuestro pueblo. Pero existe un acontecimiento local que con el paso del tiempo está convirtiéndose en el sustituto del pregón a las fiestas; y ese es "10k-Socuéllamos".
Por pertenecer al club de Atletismo que organiza el evento, durante este fin de semana toca doblegar esfuerzos e intentar colaborar en todo lo posible, para mediar en lo posible el esfuerzo de mis compañeros que durante toda la semana han hecho un gran sacrifico personal, llegando tarde a casa y sacrificando tiempo con la familia, para poder ofrecer a todos los participantes un buen sabor de boca y despedirlos a todos con un "¡Os esperamos el año que viene!".
Desde el momento que suena el despertador uno se levanta con cierto estrés, por si todo estará apunto, por si nos hemos olvidado algún detalle importante, etc... y esta tensión no se aliviará hasta que desde abajo observamos la entrega de premios; Román puntualiza en petit comité "para el año que viene tenemos que...". Éste detalle refleja como mis compañeros se toman esta prueba popular, intentando en todo momento mimar al corredor popular para que se sienta ganador por un momento.
Casi todos los años necesito cierto tiempo para asimilar todo lo que sucede en la Carrera de 10K-Socuéllamos, y el porqué se debe a la carga de adrenalina que se produce durante el transcurso de la carrera y al cúmulo de emociones al ver a muchos trabajar tan duro por una sonrisa como agradecimiento o una mueca de gratitud, por ello este año me quedo con estas imágenes extraídas de la web del Circuito de Ciudad Real.
Enhorabuena a todos y gracias por esa sonrisa de gratitud que nos llena enormemente.

Una imagen vale más que mil palabras y mil imágenes valen....; GRACIAS A TODOS !!!



Todas las imágenes están tomadas
de la web del Circuito de Ciudad Real


Los expertos en temas de running comentan y escriben que entrenando en solitario, uno llega a conocerse mejor, de esta forma entiendes tus limitaciones, dominas tus esfuerzos y puede llegar a superar gracias ha ello ciertos obstáculos. Pero con el paso del tiempo uno sabe donde está sus limitaciones, y creo que la mía está en entrenar mucho tiempo en solitario.
Por circunstancias llevo demasiado tiempo sin coincidir con nadie para salir a entrenar, y ya lo echaba en falta, por ello este domingo a primera hora estaba despierto (bueno por ese motivo y por unos chavales que han alquilado un local cerca y no han parado en toda la noche), para salir a entrenar con JCarlos después de la baja de Ismael. Nos acercamos a monte de Vadohondo, para disfrutar de una mañana fresquita, con terreno blando y mullido, el cual hacía meses que no pisaba. Después de los habituales ánimos y suspiros profundos antes de comenzar a trotar, y de pasar de los típicos saludo "!Y tu como estás!"; ha llegado el mejor momento de la mañana, donde hemos apartado los ritmos intensos (menos mal. porque sino...) para ponernos al día uno del otro y viceversa. Los entrenos en compañía pasan como un suspiro, pero lo mejor es el parecido que tiene este buen rato con la degustación de un buen vino, y el buen sabor que deja por mucho tiempo.
Como dice un buen amigo, "¡Gracias Friend!", por dejarme acompañarte.

Ah, me olvidaba:
14 km en 1:16:37 (1º km en 5:58) y sigo sin pulsaciones (a io cual me estoy mal acostumbrando)

Y el 21/10/2011
8,3 km en 0:50:24 (1º km en 8:37)

Esta mañana mientras me dirigía en metro al hospital me he encontrado con mi hermana Belen y he querido pensar que era una buena señal.
Desde el momento de entrar he notado algo distinto; aunque es el mismo edificio de siempre, el interior no se parece en nada, se ha vuelto políticamente más luminoso, más minimalista, pero más impersonal, de hecho me han cambiado de planta; después de preguntar en el punto de información me han dirigido a la consulta de recepción de Alercología, y observando un poquito me he dado cuenta de que han desaparecido las paredes blancas siendo sustituidas por cristaleras semiopacas; y donde educadamente pero con un tono severo y estricto me han acompañado hacia una máquina para introducir mi DNI y a partir de ese momento no desprenderme de un papelito como si fuese mi boleto de lotería; a continuación me han aconsejado esperar mi turno en una sala. Al entrar en ella he observado como casi todos me miraban, o esa ha sido mi primera impresión; pasado un rato y observando más fijamente, he comprendido que miraban atónitos a un monitor situado encima mío, y aducido por la situación, minutos más tarde me encontraba con mi cita en una de mis mano y con la mirada fija al monitor esperando que apareciera iluminado el número "ALG03/6". 



–¡Bingo!–, he gritado interiormente al ver anunciar mi número, mientras me dirigía a mi sala, allí con algo de nerviosismo he confesado ante el doctor, mis síntomas, mis sospechas, mis temores y por su puesto mis preocupaciones; incluso incidiendo en mi mayor preocupación sobre la contaminación. Creo que viéndome tan angustiado, me ha dado una palmadita en el hombro remitiéndome a los resultados de la espectrometría que me harían a continuación. Al entrar en la enfermería, le advierto a la enfermera mi torpeza en la prueba, la cual tengo que repetir casi todos los años; toca la hora de inspirar y expulsar. Como un niño chico, soy felicitado, pero al comprobar los resultados me comenta que hay que volver a repetirla porque no son muy aceptables –creo que se va ha nublar el cielo–, suspiro mientras salgo a la sala de espera.



De vuelta a la consulta del doctor, éste me comenta que tenía razón en mi preocupación, que la repetición de las pruebas se comprueba que he ganado un porcentaje alto con respecto al primer ejercicio, y que ese porcentaje existente cree que puede ser ganado cambiando la dosis del inhalador. Pero sin embargo la experiencia me dice que con el tiempo al aumentar la dosis, el paciente asmático se habitúa a la medicación y ésta pierde su eficacia. Lo gracioso ha llegado cuando me aconseja que cuando entrene inhale una o dos tomas de Ventolin® un cuarto de hora antes. No he podido evitar sonreír, al ver la cara que ponía cuando le he dicho a la hora que entrenaba, –"Pues déjalo, pero si ves que durante varios seguidos empeoras, !Madruga más!– me contesta mientras reía.

Mientras tomaba un café antes de regresar al trabajo no podía dejar de pensar que sería de mí sino no practicase deporte con asiduidad y no llevase una vida más o menos saludable, incluso creo que llegado haber la visión de mí mismo sentado en un sillón de skay con una mascarilla conectada a una botella de oxígeno a mi lado.
Los corticoides asoman por el horizonte

Hoy el despertador ha sonado demasiado cañero para el sueño que tenía, y le he pedido una "kit-kat" de nueve minutos, para más tarde levantarme con unas legañas en los ojos que no me dejaba abrirlos. Visto que las temperaturas por fin han empezado a bajar me he equipado con el tipo de camiseta que me acompañará durante estos meses, y al salir a la calle el frio me ha calado hasta los huesos e intentado comenzar a correr lo antes posible, pero desde el principio los ojos han empezado a llorar, algo normal en mí cuando llevo poco tiempo despierto y hace frío, pero lo anormal ha sido que durante todo el entreno no he parado de lagrimear; hasta tal punto que he dejado de secarme los ojos a mitad de entreno comprobando que no servía de nada; algunos me miraban extrañado,  pero quizá mi subconsciente quería gimotear algo como..... !!quiero dormir!!!
Los entreno entre semana siguen en la misma fase, intentando resetear la forma de correr, ampliando la zancada; corriendo con un ritmo controlado; entrenos por debajo de la hora y de esta forma no forzando la máquina para adaptar al cuerpo al impacto del asfalto e intentado que de esa forma no odie correr.

Lo curioso es que desde este verano hay más gente practicando ciclismo a esas horas que haciendo footing, por lo que los dueños de los perros han decido hacerles visibles con unos collares luminosos e intermitentes, y en días como el de hoy con los ojos vidriosos, uno no sabes muy bien quien viene de frente si un veloz ciclista o un perro encabronado porque ve una luz sobre él que le persigue.


Hoy:
8,5 km en 0:50:20 sin ppm (1º km en 7:49) 8 ºC / Triumph 7

Al abrir los ojos compruebo que son las nueve menos veinte, me levanto intentando hacer el menos ruido posible para no despertar a los invitados y salto a la calle con muy poco tiempo transcurrido, me quedo un rato pensando que debería a ser todos los días así para no perder el tiempo que pierdo. Sin dejar pasar mucho tiempo y observando que la marquesina marcaba 8 ªC de temperatura, me he lanzado a correr sin esperar a saludar al garmin; durante un rato y comprobar las piernas cansadas de ayer, voy planificando sobre la marcha, un circuito para cambiar el recorrido habitual y que no se parezca al de ayer. Pasados 9 minutos compruebo que el garmin está perdido, no encuentra señal y me parece increible, pues estoy en la explanada de la Puerta del Rey, Me decanto por apagar el garmin y volver a encenderlo para que recupere la señal; entro en la CdC, me cuesta , y al mirar al "chino" observo que el ritmo me lo marca en km/h; dándome cuenta que con las prisas olvidé cambiar el tipo de entreno, viendo que marca unos 2 kilómetros con más de 20 minutos de entreno; decido cambiarlo durante la marcha y sorpresa, el ritmo aparece en min el kilómetro pero desaparece el tiempo y la distancia. 
Pues nada, a piñón fijo por el carreterín paralelo a la carretera de Castilla hasta llegar a la tapia, aprovecho que pasa un grupo a mi lado por el Paseo de los Piñoneros pero a la altura del cruce con la carretera de Castilla y con el paso de los metros estos se distancian más, con lo que intento mantener un ritmo que me permita aguantar toda la jornada, al cruzar el puente sobre la vías del tren vuelvo por la senda que circula a su lado y disfruto castigando las piernas con los toboganes de esta senda.

Llego a casa reventado, y el cansancio es visible pues al entrar por casa me lo hacen saber; las piernas como palos pero con una sonrisilla por que no me encuentro muy mal, y el ritmo ha llegado a ser alto para la caña que me metí ayer entre unas cosas y otras. Puede que el entreno empiece a dar resultado. 

Lo más sorprendente son los datos del garmin.
He tardado en un km ¿1119253504?

Los parciales de la hora y cuarto aproximadamente de entreno de hoy son :
1º parcial: 2,09 km en 0:21:33 (0 km en 0:09:21 y 2,09 km en 0:12:11)
2º parcial 10,39 km en 0:44:56 (los tres primeros kilómetros con los siguientes tiempos 1km en 1119253504 ; 2km en 5:14 ; 3km en 12205:31:10)

El resto de entrenos de la semana se resume en
15/10/11, paseo en bici (con 5 subidas):
43,66 km en 1:57:13 (22,3 km/h) sin ppm

14/10/11, Entreno de carrera:
7,72 km en 0:48:35 (6:18) con ?¿ ppm (1º km en 0:12:16) 11 ºC / Triumph 7

Me despierto y entre sueños me pregunto que hora será, y en ese preciso momento suena la radio del despertador; me lanzo como un relámpago hacia él, para demostrarle que hoy si estoy despierto. Otra cosa es que no me desprenda de la pereza al levantarme. Por la ventana de la cocina entra cierta corriente, lo que me hace pensarme buscar una camiseta de tirantes o sin mangas para ponerme debajo (empieza la temporada de la segunda capa), rebusco entre los cajones en la oscuridad para no despertar a Luisa, palpando encuentro una camiseta que por su tacto me convence, al salir a luz me encuentro escrito "Evl7", "!Joder!, pero si es la camiseta de Ernesto", pues hoy me toca volar en el entreno por cargar con esta responsabilidad.
Sin embargo la ilusión me ha durado minutos, sigo sin encontrarme bien, creo que las prisas y la ansiedad se están apoderando de mi mente y va a tocar durante un tiempo luchar otra batalla distinta a la física. Por lo que pasado el primer cuarto de hora decido correr controlando la respiración (pues me he quedado sin pila para el pulso) ampliando la zancada al tiempo y olvidando ritmos y fatigas.

Al final mejores resultados que impresiones:
7,48 km en 0:49:18 con ¿? ppm (1º km en 13:29) 10ºC / Triumph 7



De vuelta a casa me toca trabajo de mecánico, pues ayer al regresar por la tarde del trabajo a mitad de camino a casa se soltó el manillar de la abrazadera de la potencia, quedándose el manillar suelto y deslizándose este como loco de derecha a izquierda y a la inversa.
Pá venos matao !!!
Creo que "Haberlas Haylas" !!! o algún ca.....

 Con los tornillos flojos y el manillar descentrado
y una holgura de la abrazadera de más de 1/2 cm, llegue ayer a casa !!!






Aunque peor es esto y mira que la sabana es extensa !!!




Después de las malas sensaciones del otro día, decidí tomarme el finde con tranquilidad y descansar; además con los cambios de tiempo de estos días uno no sabe muy bien que ponerse, pues dependiendo de la hora, puede que falte ropa o que te sobre casi todo. Por lo tanto el sábado me decanté por esperar a la llegada del pedido del supermercado, y salir a media mañana con la bici para soltar piernas. Las primeras sensaciones fueron malas, no entraba en calor con el uniforme de verano y los gemelos se resentían de los calambres del sábado pasado. por lo que tuve que poner desarrollos altos para evitar hacer demasiado esfuerzo con las piernas, lo que se convirtió en un trabajo cardiovascular; al motor hay que pasarlo de vueltas de vez en cuando. Exceptuando un par de subidas el recorrido fue casi plano, recorriendo tramos suaves y muy concurridos debido al corte en muchos tramos de  la CdC por la Carrera Popular del Corazón.  
En total salieron:
45,37 km en 2:06:27 (21,5km/h)

Hoy ha sido reposo total, descarté salir temprano a entrenar y lo sustituí por un buen desayuno, tranquilo y copioso, para después acercarme sin prisa a la CdC a ver a Fernando Jr., participar en el SERTRI en la modalidad de Supersprint. Mañana fresquita, lo cual me hacía recordar las palabras de Fernando la semana pasada cuando me contó que en junio lo había pasado fatal con el agua, por lo fría que estaba. Al llegar busco a la Familia Herrero, sin embargo son ellos los que me encuentran, los noto nerviosos e ilusionados, saludo al "Junior" al entrar en la zona previa al lago, deseándole suerte y le digo a su padre "!Joer! pero si creo que ha crecido estos días". Buscamos una zona donde podamos observar la zona de natación colocándonos detrás de la pasarela de los nadadores, desde ahí podemos verlo en los minutos previos. Suena el pistoletazo y salto al agua, nervios por el miedo algún calambre o golpe de algún contrincante. 


Chic@s, al agua !!!
Fotos obtenidas de: http://www.rafamontoya.com/2011/10/cronica-del-triatlon-sertri-en-madrid.html


Después de unos minutos que para algunos fueron breves y para otros eternos, vemos salir a Fernando del agua, damos los primeros gritos de apoyo y corremos casi detrás de el para verlo en el primer giro de la bicicleta, existe cierto caos en esta transición pues coinciden con otro grupo con bicis de cualquier tipo y camisetas naranjas, volvemos a vitorearlo y las mas pequeñas dan gritos y saltos de emoción. En cada giro se le ve mejor y más delante, al salir de la transición de bicis le observamos con una zancada amplia y muy buena cara, durante el recorrido de carrera a pie su padre me dice que le acompaño con la bici, y al Jr. le noto fresco; aun así por miedo le aconsejo que regule y tome aire; pero el tío está tan fuerte que no para de hablar y comentarme cosas durante este tramo; entrando en la meta fresco y feliz saludando a la familia y a alguien más. Al salir de boxes se le ve como una rosa, bebe un poco y se le ve entero con la sensación de no haber corrido, a algo que no me extraña, porque el niño ha pegado un estirón y empieza a tener físico de hombre. A su lado están sus padre; él, creo que controlando las emociones como su hijo el cansancio y ella, orgullosa, feliz y emocionada porque no le ha pasado nada.
Al final hizo el recorrido en 30:27 (300 m + 8 km + 2 km), siendo 13 en meta y creo que primero de su categoría.
Fernando, creo que hoy tu hijo nos ha jubilado !!!

Hoy mi ordenar está triste, funciona lento y quizá sea porque echa de menos a su fundador.

El diseño no es solo lo que se ve o lo que se siente. Diseño es cómo funciona.

Esta mañana mientras me duchaba un escalofrío ha recorrido el cuerpo al oír la noticia, y mientras desayunaba el Mac me ha confirmado la notica con el pantallazo de inicio de safari. No soy admirador de casi nadie y casi nada, pero después de casi 20 años "Think Different", a este tipo le había tomado cariño; primero, por facilitarme mi vida diaria y segundo como emprendedor y visionario del futuro; un tipo capaz de saber antes que nosotros mismos lo que queríamos tener y en algunos casos incluso desear y en mi caso en más de una ocasión hacerme romper la hucha.

"Think Different"

Creo recordar que en 1997 apareció el primer iMac, rompiendo con lo cánones establecidos en el diseño de los ordenadores nos desprendimos de la caja cuadrada de sobremesas y consiguió convertir el ordenador en un elemento mas atractivo, el cual podía presidir cualquier habitación; el ordenador se hizo visible en el hogar. También recuerdo cuando Luisa volvió a casa un día decepcionada diciéndome que nadie sabía, ni conocía lo que era un ipod y que se había pasado todo el día explicando que me había regalado para mi cumpleaños; –Bienvenida al mundo de la manzana– le conteste; y han pasado más de 8 años y todavía me acompaña cuando me encuentro solo o quiero motivarme.
Sin embargo ahora es imposible que nadie desconozca el símbolo de manzana mordida y lo asocie instintivamente al iPhone. Desde hace unos años cualquier lanzamiento de Apple en su Worldwide anual aparece en portada de periódicos, web y telediarios, donde ocupa la franja de "prime time" que a su vez se convierte en su mejor publicidad.
Desde ahora hay una incógnita, hacia que diseño evolucionará el mundo en esta época de crisis.
Adiós visionario.

"... Si hoy fuese el último día de mi vida, ¿querría hacer lo que voy a hacer hoy? Y si la respuesta era "No" durante demasiados días seguidos, sabía que necesitaba cambiar algo. Recordar que voy a morir pronto es la herramienta más importante que haya encontrado par ayudarme a tomar las grandes decisiones de mi vida. Porque prácticamente todo las expectativas de los demás, el orgullo, el miedo al ridículo o al fracaso se desvanece frente a la muerte, dejando sólo lo que es verdaderamente importante. Recordar que vas a morir es la mejor forma que conozco de evitar la trampa de pensar que tienes algo que perder. Ya estás desnudo. No hay razón para no seguir tu corazón..." Steve Jobs en 2005 en un discurso de graduación en la Universidad de Stanford.

Discurso completo en Stanford; Os recomiendo ver a partir del minuto 8:45


Me he despertado temprano, antes de que tocase el despertador y para evitar el abrazo de Morféo como sucedió ayer he decidido levantarme y prepararme para salir a entrenar, sin embargo, creo que el dios griego me tenía agarrado porque he tardo un montón en vestirme y salir a la calle, he dado vueltas tontas por toda la casa buscando cosas que tenía delante. Pero quizá el cuerpo quería entretenerme para evitar la jornada de hoy.
He salido con algo de fresquito y mi gran compañero de entreno "el Garmin" se encontraba peor que yo, el pobre sufrió más de la cuenta el sábado en Boadilla llegando a perder alguna pieza, que puede que sea fundamental y que hoy le ha vuelto loco; de hecho ha tardado casi 14 minutos en marcarme el primer kilómetro y después durante el entreno ha perdido varias veces la señal, lo que me ha echo pensar en los próximos Reyes. Por mi parte fatal, no he encontrado el ritmo, las piernas pesadas; bueno quizá, muy muy pesadas, sin motivación y como mi compañero no me registraba el pulso, he decido recortar para volver a casa y evitar hacer el tonto, pues lo de hoy no era entrenar; quizá fuese una pesadilla ???

6,12 km en 0:45:02 (7:22) con ––ppm (1º km en 13:57) 10ºC

Eran cerca de las nueve de la mañana y me encontraba tomando dirección a Boadilla del Monte; a mi espalda una mochila repleta de cosas "por si acaso..." (hay veces que la mochila de fin de semana de viaje al pueblo llevo menos cosas que hoy). Durante el viaje me tomo mi bebida energética acompañando a la barrita; pues existe un intervalo de 3 horas entre el pobre desayuno y la hora de inicio de la prueba, y dialogo con otro duatleta que a tomada la alternativa del transporte público.
Al llegar al club Encinas recogida de dorsal y toma de contacto con el ambiente y es donde surgen los primeros nervios, nervios de novato, pues aunque no es el primer duatlon, si han pasado dos años desde mi último y me siento perdido, junto a los boxes preparo la bici para poder dejarla e ir a cambiarme tranquilamente y a la hora de abrir la mochila surge el caos que se apodera de mi cabeza, pues no recuerdo donde he dejado eso y donde está aquello; intento hacer todo deprisa para pasar inadvertido y mientras me preparaba para dejar la bici oigo por megafonía que el chip hay que colocarlo en pierna izquierda "joer, me han visto"–, exclamo. Después en los vestuarios decidiendo si al final corrí con culote o con mallas, oigo por megafonía "el dorsal 345, tiene mal colocada la bici", pues ese soy yo pero hasta que no decida que ponerme no salgo en gayumbos a cambiarla.
Después de haber decido la indumentaria, haber cambiado la bici de posición, dejado la mochila en el ropero; tocaba calentar y observar las sensaciones que desprendía las piernas y el cuerpo a lo cual tengo que decir que no eran buenas; me encontraba pesado, como si hubiese terminado de comer hace pocos minutos y las rampas de los senderos junto a la salida me hicieron meditar que coño estaba pensando el día que me apunté, por lo que decidí estirar y andar para soltar los nervios, esperando al último momento para colocarme al final de los participantes. 

Salida, no hay vuelta atrás !!!


Suena el pistoletazo de salida para las mujeres, todos aplaudimos efusivamente a las veinte valientes que se dirigían hacía las primeras cuestas, mientras esperamos nuestro turno, soltamos los nervios con saltitos y algún grito que otro. Se oye el disparo, unos tímidos aplausos y los primeros gritos de ánimo de los familiares, la salida es rápida o eso me parece a mí, los primeros toboganes me los tomo con calma y me adelantan los pocos que andaban por detrás de mí; con el paso de los metros el cuerpo entra en calor y el ritmo comienza a ascender, pasmos el primer kilómetro y pienso que es hora de ir forzando la máquina, me pego a algunos corredores para fijar el ritmo; el recorrido es exacto al de un par de años, y en el kilómetro 3 nos encontramos con la temida pared (la cual habrá que volver ascender en bici), subo bien pues las piernas tienen fuerza (mi motor se ha convertido en diesel después de la inactividad de estos meses), el circuito como habían avisado durante el calentamiento está seco y existen muchos bancos de arena lo cual me preocupa para el sector de bici; después de ascender las dos temerosas cuestas toca disfrutar de un combinación de toboganes con curvas cerradas y senderos estrechos, entremos por los establos de la zona de hípica y nos machacan con la última cuesta que al igual que la edición anterior me deja fundido antes de la primera entrada en boxes para hacer la transición y llega el primer despiste (al entrar en sentido contrario, me he equivoco de fila), tomo aire mientras que me pongo guantes y casco, tomándome con cierta tranquilidad la salida con la bici.


Había leído por la noche la intención de recortar el sector de bici pasando de 20 a 16, y viendo la velocidad con la que se tomaban la salida el tramo de bici pensé que era verdad que habría menos distancia y por ello esa velocidad en los primeros metros, en la primera curva cerrada nos encontramos por los suelos a un corredor con una bici desmontable, la rueda le patina constantemente y no puede controlarla (este no acaba...), noto en los primeros kilómetros a la gente muy nerviosa bloqueando el recorrido, cerrando en curvas y colándose por cualquier hueco, yo decidí tomármelo con calma, aprovechar para tomar un gel y beber para poder digerirlo; y controlar para evitar a los nerviosos contrincantes, así hasta pasar la pared del km3, al llegar subo desarrollo me pongo de pie y empiezo a esquivar a gente que hecha pie a tierra; toca el turno de gritar "por tu izquierda....", "por tu derecha....", "cuidado que...", hasta que al final uno no me oye y me obliga a varios metros del final poner pie en tierra. Desde este punto noto que empiezo a adelantar, el circuito me suena y toda este tramo es pistero, por lo que se puede correr sin ser interrumpido, cruzamos por la zona más alejada de meta y tocan las últimas ascensiones, llegados a este punto empiezo a notarme muy fresco y con ganas de guerra, en la última cuesta veo un hueco por la derecha cambio y me incorporo para darlo todo y adelantar a gente, entonces noto un pequeño calambre que me previene de lo sucedido hace dos años y que termina obligándome a tirarme al suelo pues soy incapaz de estirar la pierna izquierda agarrotada. Después de unos minutos estirando, me vuelvo a subir y termino la dichosa cuesta ahora toca descenso prolongado y serpenteante, donde me llevo algún susto y esquivo buscando escapatorias, lo cual me hace pensar que queda mucha carrera y que hay que reservar y controlar la bici. Pasamos (y hablo en plural porque hacemos grupo hasta meta) por la zona donde coincidimos con el último tramo a pie y hay gente que van como flechas; nos quedan unos 4 kilómetros y podríamos decir que recorremos el tramo más técnico, con continuas curvas cerradas, zonas estrechas con bancos de arena y pistas rotas por surcos. Al igual que la primera parte de running la cuesta de las caballerizas antes de entrar en boxes me ha vuelto a dejar seco, por lo que al dejar la bici me he tomado mi tiempo para beber (algo que casi no hecho en carrera y que al final casi pagaré) y resoplar las veces necesarias antes de empezar la T3; al salir oigo a un niño decir "estos van muy despacio, mamá", –jodio, y no sabes el esfuerzo que estoy haciendo para correr a este ritmo"–. Los tramos de tobogán del último tramo los paso como puedo, incluso llego a ver el ritmo de 7:18, y entonces pienso "Pablo, no te pares!!!", y con esta idea llegamos a los últimos 500 metros finales donde la organización nos ha regalado un alfombra de césped que nos alivia los dolores de las piernas para cruzar la meta con la mejor sonrisa posible.

Fin !!!

Al cruzar la meta ando durante un tramo y busco una botella de agua, el avituallamiento esta repleto tanto de corredores como de bebida y alimentación, descanso y recupero fuerzas, ahora toca ducha recuperadora, recoger la bici y volver a casa. Al final el tiempo ha sido 1:42:38 según el chino pero la distancia me ha dejado dubitativo durante todo el trayecto de vuelta "24,5 km distancia total", ¿Cuantos km han sido de bici?, pues los puntos kilométricos de carrera casi caían clavados.
Conclusión, pues magnífica organización de un duro Duatlon, inmejorables instalaciones y divertidisimo circuito (si tienes fuerzas, claro), la única pega es la descompensación entre carrera a pie y en bici, esta última siendo demasiado corta.
Y que he acabado "pinchado" en todo su amplio significado. Pero si puedo repetiré !!!



En el trayecto de vuelta da tiempo para hacer cosas; por ejemplo, descansar.


Sólo pongo mis tiempos, por vergüenza, claro !!!  

Esta tarde ha tocado dentista y después de casi tres cuartos de hora con la boca abierta, me ha aconsejado la odontóloga que no bebiese ni comiese durante casi 2 horas, por lo que inmediatamente se ha cruzado por mi cabeza salir a correr; "¡será la mejor forma de no pensar en comer!" –me he dicho–. 
La idea era salir y probar un ritmo para el sábado, y el comienzo ha sido duro pues aunque la zancada era más amplia de los últimos entreno el ritmo del garmin me decía que no; además encontraba las piernas agarrotadas y muy pesadas, pero he entendido que era normal y que con el paso del tiempo mejoraría. Sin embargo pasados más de veinte minutos, mi estado de pesimismo era el mismo, e incluso he pensado en parar, aunque viendo que estaba apunto de llegar al punto más lejano de casa he cambiado de idea, he apretado los dientes pensando que sería mejor correr rápido para estar más cerca de casa en el momento que me diese la pájara. Durante los toboganes (si se puede calificar así) de la orilla del río junto al parque de la Arganzuela, me he sentido como Forrest Gump soltando lastre y ataduras; me he sentido algo más frescos siendo a su vez el ritmo más alto. Sin embargo los últimos 10 minutos han sido demasiado largos, las piernas advertían que estaban llegando al límite y para no oírlas le he metido cuestas; llegando al final con las piernas doloridas pero con la satisfacción de hacer un buen entreno y con la recompensa de un menú de dieta blanda, ¡Viva el yogurt!

Lo que peor llevo es el miedo escénico, pues estoy acojonado ante la carrera del sábado, tengo la impresión de que voy a sufrir mucho, pues no me he encontrado bien estos días, el cansancio acumulado de las jornadas largas de trabajo durante este mes, las clases por la tarde y ante todo la mala alimentación debido al fat food y el bocata de turno están sumando factores para que la ecuación dé resultado negativo,  aunque la ilusión por volver a participar en esta prueba es enorme, solo espero salir sano y salvo.

Sólo espero no imitarlo el próximo sábado !!!

Hoy 
10,84 km en 0:59:14 (5:28) con 95 ppm (1º km en 6:32) 22ºC / Triumph 7

Como un niño con zapatos nuevos me he levantado esta mañana, ayer al hojear la bici comprobé porque hacía el ruido metálico los frenos delanteros, la explicación es sencilla me he comido literalmente las pastillas, por lo que me toco ayer buscar urgentemente unas nuevas para poder entrenar mis facultades de mecánico (que son casi nulas), bueno quizá lo que estaba entrenando es mi facultad de ahorrador como dice el anuncio de ING.


Después de mucho buscar, leer, mirar en la web, llegué a un comentario en un post que decía "...si no tenías experiencia en el cambio de frenos podría salirte la reparación muy, muy cara"; "¡¡perfecto!!" –me dije–, la experiencia de ahorrador me va a durar muy poquito. Después de un tiempo –el cual me pareció eterno– y con las manos negras, me encontraba rezando pues la manecilla del freno hacía tope y la rueda no notaba ninguna tipo de frenada, pero con la insistencia el liquido volvió a su sitio y el freno con el tiempo recobraba su función. Aunque mirándolo por su lado bueno he salido ganado, pues además de ser ahorrador, ya puedo advertir de mi presencia a los peatones, y es que en la primera frenad en un paso de cebra he visto como dos personas me miraban asustadas, lo cual me ha extrañado tanto que me he quitado los cascos y he comprobado que rechinaban los discos escalofriántemente. 
Por lo demás, jornada ciclista donde he disfrutado de un día maravilloso, aunque las piernas han notado el esfuerzo de ayer y en la última parte me he tenido que rendir a la evidencia y recortar el entreno a las 2 horas exactas. Dos horillas donde no he notado para nada el sillín nuevo (como la herramienta la tenía en la mano y el sillín llevaba meses esperando, pues...), ruta con el terreno excesivamente seco porque se nota la falta de lluvias, y donde en algunos tramos no he podido correr por la gran cantidad de gente que ha disfrutado de uno de los pocos días ciclistas que nos queda antes de la aparición de lluvia y frío.


Además hoy la naturaleza me ha dibujado la sonrisa y ha puesto la anécdota, pues subiendo por el pinar del santo hacia la puerta de Humera a cruzado un zorro persiguiendo a un conejillo unos 50 metros delante de mí, por lo que he disfrutado de mi sesión particular de National Geographic; una autentica maravilla verles correr a ambos jugando al juego de la supervivencia. 

Hoy:
42,23 km en 2:00:03 (21,1 km/h) con 73 ppm (algo me dice que la pila...)


Hoy dejo la bici para calzarme las zapas. Durante esta semana he notado un ruido que no me ha gustado nada en los frenos delanteros de la bici y como me he levantado perezoso, he decido cambiar de disciplina y posponer el vistazo al ciclo.
He salido algo tarde y el calor era más característico de principios de julio que de la época de otoño en la que nos encontramos, eso sí, que no me lo cambien, me está constando demasiado el cambio de armario.
Hoy tocaba tirada larga, hacer sobre la hora y media, controlar las pulsaciones y el ritmo para no tener que abandonar; de esta forma ganar carga y optimismo con vistas al fin de semana que viene. Como la prueba de Boadilla es un duatlon crooss, he retomado uno de mis circuitos favoritos de la CdC corriendo por los senderos paralelos a la vía y practicando los toboganes hasta culminar subiendo el cerro de las covatillas, desde aquí me dirijo al portillo de los pinos. Desde aquí vuelta a casa, pues casi he llegando y la hora las piernas están algo cargadas, el ritmo empieza a acusar la falta de entrenos previos, por lo que decido volver por la senda del bosque paralelo al camino del pinar grande hasta el cruce con la carretera de la ciudad univerersitaria y de esta forma dejarme llevar hasta llegar al embarcadero de Lago, donde el cuerpo pide reposo o refresco y dedico complacerle con lo segundo en la primera fuente que encuentro.

Vista del Lago.

Miro el reloj y decido proseguir hasta que el "chino" grite que he llegado a los 15 km o sino cumplir con el entreno de hora y media, pero sin embargo al llegar a la Puerta del Rey, he parado el crono sin llegar a ninguna de las dos previsiones, y mientras recuperaba el aire he aprovechado para ver alguna partida de 3x3 de baloncesto callejero que se celebra en la explanada. 
Cuando la cabeza te pide parar cualquier excusa es buena.


Os dejo una foto a la salida de orcasitas que me ha encantado al salir del cercanías, un atardecer holywoduense.


Hoy:
14,63 km en 1:22:35 (5:39) con 136 ppm (1º km en 5:55) 18ºC / Triumph 7

Después de más de quince días sin calzarme las zapas, el martes decidí que ya era hora; bueno, eso y que me estoy quedando sin tiempo para preparar Boadilla del Monte dentro de otros quince días y me veo muy corto de forma, para poder aguantar dignamente. Pero tuve que posponer el entreno a la tarde y forzado por mi subconsciente que me taladró la cabeza durante el día con el sentimiento de culpa.

Por todo ello hoy he decido anticiparme a la llegada del otoño, me he despertado pronto y he decido retomar una rutina abandonada, la de madrugar y correr a primera hora de la mañana. Al llegar al comedor he notado algo de fresco que se colaba por la ventana y he pensado que el verano se ha terminado sintiendo un escalofrío que recorría el cuerpo y que me recordaba a los entrenos invernales. Lo más destacable el cambio de temperatura, pues aunque por el día el termómetro nos muestra temperaturas altas, por la mañana refresca y el cuerpo tarda en sudar y en entrar en calor; bueno y si le sumas los ritmos de carrera que el cuerpo cervecero del verano no deja correr fluidamente.

Visto el error cometido el martes donde me quede sin aire por empezar muy deprisa hoy el comienzo me lo he tomado con tranquilidad y que las piernas acumulen carga en este primer día de otoño. La sorpresa me la he llegado al volver a casa y escuchar que Rapid Eye Moviment se separaba y no he podido dejar de escuchar en mi cabeza el ritmo de "Stand", acompañada de la cartela de la serie "Buscate la vida" y al "loco" (como nos gustaba llamarlo) y sus aventuras. 


Hoy:
9,32 km en 0:58:29 (6:17) con 107 ppm (1º km en 10:20) 13 ºC / Triumph 7

Martes 20/09/2011
8,84 km en 0:55:20 (6:16) con 134 ppm (1º km en 11:03) 26 ºC / Triumph 7